REf. https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=6403063
He realizado este artículo de investigación publicado en la revista «Asturies memoria encesa d’un país» en asturiano (Llingua). Número 36, Junio de 2016.
Comparto la versión en castellano:
Referencias astronómicas en escritos del siglo XVI en Asturias.“Astronomical references in writings of the sixteenth century in Asturias.”
It is not common to find references to astronomical events in Asturian texts of 500 years ago. In this small article we will unveil some of them and try to contextualize them and technical analysis of the events described.
No es nada habitual encontrarse con referencias de acontecimientos astronómicos en textos asturianos de hace 500 años de antigüedad. En este pequeño artículo vamos a desvelar algunos de ellos e intentar contextualizarlos en la época y visionar técnicamente los eventos descritos gracias a las nuevas prestaciones en cálculos y simulación disponibles en nuestros días.
Lo realmente reseñable y que merece mención especial es la figura de Tirso de Avilés (1517- 1599) en sus escritos a modo de crónicas de “Armas y linajes de Asturias y Antigüedades del Principado” reedición ed. GEA-Uviéu-1991.
Tirso de Avilés y Hevia se dedica a la carrera eclesiástica renunciando a sus derechos como primogénito en favor de su hermano. Se convierte en canónigo de la Catedral de Oviedo y juez del Cabildo catedralicio. Su reconocimiento llega gracias a sus estudios eráldicos de epigrafía y de historia de gran importancia pues es de las pocas informaciones que ha llegado a nuestros días en ese campo dentro de Asturias si bien muchas de sus obras hoy en día se encuentren desaparecidas.
En la obra “Antigüedades del Principado” podemos ver numerosas referencias en base a los años a los acontecimientos de todo tipo acontecidos en Asturias, pero voy a pararme en concreto en dos referencias: una del año 1578 y otra de 1580.Cito textualmente:
“– Cometa que duró setenta días. – Año de 1578, a los once de noviembre apareció en el cielo una boca de noche, una estrella que llaman los philosofos cometa, la cual era de extraña grandeza y echaba unos rayos y resplandor de si a manera de cabellera muy grandes y espantosos, que a todos los que la miraban hacía maravilla y aún ponía horror. Duraba en el cielo cada noche de sesenta o setenta continuas noches que apareció 5 o 6 horas, que era desde las cinco de la noche que oscurecía, hasta las once o doce de la noche. Todos los filósofos y hombre doctos que lo vieron, ansí en las niversidades como en las ciudades de estos reynos confirieron tener y señorear más sus influencias sobre el reyno de Portugal y que en aquel reyno havia de mostrar más claramente sus efectos que en otra parte de España como se vió el año adelante, que murió tan desastradamente el rey D. Sebastian de Portugal….”
Es emocionante leer la descripción de un cometa de hace 500 años y de cómo se asocian estos acontecimientos astronómicos con desgracias o cuestiones de geopolítica de la época, tal y como se puede ver en la descripción del eclipse total de luna visible desde Asturias el 31 de enero de 1580, que analizaré posteriormente, en el que Tirso de Avilés se esfuerza relacionándolo con este cometa y la muerte de reyes de Portugal D.Sebastián y D.Enrique, su tío.
Ahora en nuestro tiempo y habiendo estudiado muchos textos y referencias a este cometa sabemos que se puede tratar del famoso GRAN COMETA catalogado modernamente como C\1577 V1, visible en toda Europa.
Para quien no pasó desapercibido fue para el astrónomo Tycho Brahe, famoso por dos observaciones en su vida: una, la de una supernova que concluyó la variación y evolución de los objetos celestes y la otra, es este cometa C/1577 V1 que indicaba que era un fenómeno que ocurría fuera de la atmósfera terrestre y ponía en valor la teoría del heliocentrismo que daría lugar a las leyes de Kepler, para luego deducir la gravitación universal de Newton y al final la teoría de la relatividad de Einstein. Gracias a las anotaciones de Brahe, que duraron 74 días, desde el 13-11-1577 al 26-01-1578, se sabe que este cometa puede estar a 320 UA del Sol.
Grabado de la época de dominio público del Cometa C/1577 V1
Respecto a las descripciones y grabados de fenómenos astronómicos y en relación a los cometas, existe otra publicación de Ambroise Paré (1575) “Des Monstres et Prodiges”, reedición Siruela, Madrid-2000. En su capítulo dedicado a los monstruos celestes, vemos descripciones y grabados dignos de nombrar aquí y que nos muestran las creencias y descripciones en base al contexto histórico y etnográfico en el que se hacen, de ahí que por ejemplo a los cometas se les grafía con cabelleras de luz o espadas celestes por ejemplo.
A continuación dos representaciones en esta obra de un cometa:
Ahora pasaremos a la segunda referencia astronómica en la obra de Tirso de Avilés, cito textualmente:
“1580- Luego en adelante en el año del mes de enero apareció en el cielo un eclipse natural en la luna desde las siete de la noche hasta las diez. La cual pareció estar abrasada con fuego, que fue cosa maravillosa de ver. En la cual noche falleció y pasó de esta vida el rey don Enrique de Portugal…”
Parece muy probable que Tirso de Avilés fuera testigo directo del eclipse total de luna ocurrido el 31 de enero de 1580, no sólo por ser visible desde Asturias, sino por el detalle tan importante de poner las horas y tiempos con la descripción cromática del mismo. Tras ver en simuladores informáticos este eclipse, no sólo puedo asegurar que fuera así, además los tiempos son aproximadamente correctos (algo que me sorprende para la época), al indicarnos en tiempo universal (TU) la duración de este acontecimiento. Podría generarse un debate sobre la manera de medir el tiempo en la época y los errores acumulados durante 500 años en esas medidas, pero en general Tirso de Avilés es un referente sin duda para la astronomía en Asturias.
Aquí una simulación de lo que se pudo haber observado en 1580 desde nuestra región:
(1) La línea de puntos es el plano orbital terrestre y la azul es la línea orbital de la Luna, durante el eclipse ambas se acercan y se cruzan en plenilunio como se aprecia en este caso de eclipse total lunar visto desde Asturias el 31-01-1580.
(2) Momento del máximo muy cerca de la estrella Regulus (LEO) y unos grados por encima del horizonte ESTE, datos para Asturias el 31 -01 – 1580.
La fecha del 31 de enero de 1580 según el calendario lunar para ese mes y año nos indica plenilunio, lo que corrobora el eclipse al que se hace referencia. Como particularidad es que era la segunda luna llena en un mismo mes, fenómeno que conocemos como Luna Azul. Es por tanto un eclipse total de una “luna azul”.
Calendario lunar de enero de 1580:
Otra curiosidad es la posición aproximada de los planetas esa misma noche, apreciándose una alineación entre El Sol, Mercurio, la Tierra y la eclipsada luna, tal y como se muestra en este esquema de órbitas hasta el planeta Júpiter. (El Sol en el centro aproximadamente y fuera de toda escala).
Las fases del eclipse lunar se pueden ver claramente en los cálculos informáticos así como los tiempos, tal y como nos describe Tirso de Avilés en su obra de referencia:
Para finalizar se puede decir que los textos antiguos no dejan de sorprendernos aún cuando transcurrieran 500 años. La información y los datos que pueden contener reflejan la historia y las creencias de los seres humanos a lo largo de su existencia y cómo podemos revivir los acontecimientos que en ellos tuvieron lugar.
Juan Marcos Álvarez Merinero
Coordinador de la Sección Astronáutica y Radioastronomíade la Sociedad Astronómica Asturiana OMEGA(Mi agradecimiento personal a Berto A. Peña por su ayuda y colaboración)